A VUELTAS CON LA BELLEZA.

 

 





  Me hubiera gustado que tuvierais tiempo para escribir un poco más hoy, poner en claro vuestras ideas lo antes posible tras leer el texto de Platón, pero a veces cuesta llegar a explicar y conseguir que lo que explicas se entienda y si ves que no y que es necesario hablar y dejar que se manifiesten las ideas, nada hay más importante que esto a la hora de potenciar vuestra capacidad para escribir, comprender lo que leéis y pensar. Así que mañana, si tenemos tiempo, os dejaré un buen rato para trabajar.

   Hoy voy a escribir una entrada que trata sobre esta cuestión, la belleza y el papel que juega en nuestra sociedad. Quizá saquéis de aquí alguna idea extra además de las que podéis haber sacado de las clases. 

   En el texto que hemos leído, un fragmento de El Banquete, de Platón, el autor nos transmite dos ideas principales, a saber:

1.       Que la verdadera belleza sólo puede ser interior, residir en el alma.

2.       Que la belleza es una manifestación de la bondad, del BIEN como idea suprema.

    La primera idea es fácil de comprender para nosotros y, de hecho, muchas personas dirían que piensan lo mismo. Sin embargo, como sociedad, no es esa la sensación que trasmitimos, sino la contraria: El culto al cuerpo. Este culto al cuerpo se manifiesta en la cantidad de horas y de tiempo que le dedicamos. Dedicamos mucho tiempo al cuerpo, a su forma física, a su atractivo sexual o a su apariencia, para resaltarlo o para ocultarlo. Yo misma llevo el pelo teñido, mi pelo real sería moreno y con canas, pero lo llevo rubio y sin canas. ¿Por qué? Tendría que reconocer distintas cosas, desde la más sencilla, creo que me favorece, hasta otras más complejas como la imagen que “proyecta en mi cabeza” el pelo largo y rubio.

   Por ejemplo, os comentaba que hay una evidente contradicción entre lo que pensamos que somos y valoramos y lo que realmente hacemos a la hora de buscar pareja.  Cuando era joven dedicaba muchísimo tiempo a mi cuerpo y mi apariencia. Con el tiempo comprendí que era demasiado y que si lo que quería era encontrar una persona que no fuera superficial, no era ese tipo de persona lo que yo estaba atrayendo hacia mí. Si lo que queremos encontrar es un hombre cariñoso, sincero, que no sea “mujeriego” poco superficial… ¿Por qué cultivar todos los aspectos que atraerán al hombre contrario? Si lo que queremos es encontrar una mujer que no le dé importancia a la belleza exterior sino a la interior, ¿por qué invertir tanto tiempo en nuestro cuerpo?   

   Algunos estudiantes dijeron entonces: NO. Esto no es verdad. “Literalmente has dicho que la gente que se arregla mucho es porque quiere atraer a otros por su aspecto” Pero lo que yo dije es que una persona que se arregla mucho DE HECHO va a atraer a gente por su aspecto. Independientemente de que lo quiera o no. Y ese es el problema, la contradicción en el caso de que no lo quieras.

  Entonces pasamos a tratar otro enfoque. ¿Por qué pensar que la persona que se arregla lo haga para atraer a otros? Pensar que una mujer que se arregla mucho lo hace para atraer a los hombres es un tópico y además, creo que pensasteis, un tópico machista.  ¡Parece mentira que Luisa diga esto!  Seguro que pensaron algunos y algunas… Pero es que la polémica ¡estaba servida!

    Es verdad, una persona sí puede dedicar mucho tiempo a su cuerpo y no hacerlo porque quiera buscar una pareja que sea atraída por su cuerpo, sino por otras razones.

 

  Estas son las razones que disteis:

   Diego, habló de los problemas físicos, inseguridades, incluso enfermedades que uno sienta que debe contrarrestar. Quieres sentirte bien contigo mismo, mirarte al espejo y gustarte. No se trata de encontrar pareja.

   El problema, sobre el que me gustaría que reflexionarais es ¿y qué es lo que tiene que ver una persona cuando se mira al espejo para gustarse? Mi sobrina es asesora de imagen personal y es cierto que este mundo es complejo y que los problemas pueden ser diversos. Por ejemplo, una persona puede tener la nariz más grande del promedio y sentirse atractiva y encantada con su nariz, mientras que otra con una nariz más pequeña piense que es un problema enorme y que va a destruir su vida. ¿Por qué?

 

2.       Raghda  sacó el tema de la presión social. Presión que, sin duda, en esto es difícil no estar de acuerdo, es mucho más fuerte hacia las mujeres. 

   Así esta cuestión requiere una reflexión. ¿En qué medida esta tendencia no está asociada a la sociedad de consumo? ¿Qué nos aporta el cuidado del cuerpo y qué nos quita? ¿Cuándo el cuidado del cuerpo deja de ser un plus, para convertirse en una especie de esclavitud? ¿Por qué esta presión es más grande sobre las mujeres que sobre los hombres? ¿Por qué algunas personas creen que es malo o ridículo que un hombre gaste un montón de horas delante del espejo, mientras opinan algo completamente distinto cuando piensan en las mujeres?

 

3.       Eva mencionó el importante tema de para qué necesitas tu cuerpo. Algunos empleos demandan una determinada imagen externa o unas características corporales. 

   Y aquí la reflexión es la siguiente: ¿Realmente mi actividad laboral demanda de mí cuatro horas de gimnasio diarias, acaso soy un deportista?  ¿Realmente mi actividad laboral demanda de mí llevar unos tacones, o ir muy maquillada-o ¿Voy a ir a actuar o algo así? ¿O son convenciones sociales? O quizá sea lo contrario, puede estar mal visto que vaya maquillada, o que lleve una determinada ropa o peinado… Pero si son convenciones sociales, como, por ejemplo, usar corbata, entonces, ¿no pueden y deben ser objeto de análisis para determinar por qué y para qué existen?



   Todas estas cuestiones están asociadas con nuestra idea de la belleza, del atractivo sexual y del atractivo estético, y de la IMAGEN que queremos proyectar. A veces la imagen que proyectamos no es la que queremos proyectar. A veces sí es la que queremos proyectar, pero no entendemos el mensaje que estamos enviando con esa imagen. A veces nos vestimos de acuerdo con unas normas que nos han impuesto desde fuera. A veces nos creamos una imagen limitada de nosotros mismos y restringimos nuestra libertad con exigencias que no son acordes con nuestra persona. Y todo esto, al final nos lleva a pensar lo difícil que es saber quién es uno mismo, si nuestro EGO o las normas de nuestra cultura o sociedad no nos juegan a veces malas pasadas, y como en tantas cosas caemos en mil contradicciones.

 

   La segunda idea que he señalado al principio de esta entrada es más compleja. Tomasteis nota de ella en la clase anterior. Se trata de un concepto global: El BIEN. La belleza es una manifestación de lo bueno que es el eje del mundo. Es una especie de creencia en un dios abstracto y global que es el motor que rige todo lo que existe. Al fondo no es tan distinta de la idea de dios de las religiones monoteístas. Luz, bondad y verdad unidas en uno sólo concepto y un solo ser. Esta también es una idea que a muchos les resultará extraña y a otras personas no. Para mi la naturaleza no es toda bondad. Detrás de cada hecho natural también hay dolor y crueldad. Me cuesta entender cómo se esconde la bondad detrás de ello. Aunque para otros no es difícil de entender y así lo sienten. En la segunda evaluación hablaremos más sobre estos conceptos que son tan importantes en la literatura: amor, odio, bondad y maldad. Concepciones de la naturaleza humana y de la naturaleza del mundo, concepciones DUALISTAS, que se basan en conceptos puros y opuestos y detrás de las cuales siempre hay emociones, deseos, valores, creencias y costumbres sociales. 

   Pensad sobre todo esto y escribid vuestras entradas con libertad y reflexionando profundamente sobre lo que pensáis, buscando en vuestras palabras coherencia y verdad. Y si os resulta muy difícil, no os preocupéis y escribid algo más sencillo sobre lo que habéis aprendido o las dudas que todo esto os suscita.