¿LOS ÁNGELES EXISTEN?



   Sí, el tiempo pasa tan rápidamente que ya estamos en la tercera evaluación y llegamos al Siglo XX.
Un siglo en el que todavían han nacido mis alumnos y alumnas pero...por poco tiempo.

  En la última clase estuvimos hablando de muchas cosas relacionadas con este siglo, os pedí que pensaramos algunos adjetivos que lo definieran y, entre otros salió el adjetivo de innovador. Y es que durante este pasado siglo la cantidad de cambios, inventos y descubrimientos tecnológicos, ha sido espectacular. Aunque haya que reconocer que la locomotora de todo esto fue la máquina de vapor allá por el siglo XIX, y con ella la Primera Revolución Industrial y el desarrollo del capitalismo, con sus luces y con sus sombras.

  La literatura ha sido, como no podía ser de otro modo, un reflejo de esa realidad. Innovación, experimentación y  ante todo, una reflexión que es una búsqueda del sentido de la vida, al que llamamos Existencialismo.  Un movimiento que supone un renacer profundo de la filosofía, nacida en Grecia como recordaréis, y que tiene una enorme influencia en la literatura.

  Esta reflexión es fruto de la tendencia al individualismo y al cuestionamiento de los dogmas y creencias de carácter religioso, a las tradiciones y normas sociales que se cuestionaban mucho más que antes ya que la vida estaba en constante cambio y transformación, precisamente movida por los cambios tecnológicos, políticos y sociales. Puede decirse que desde la Revolución Francesa hemos ido avanzando por un camino de profundización en la búsqueda de un sentido laico para la vida, con independencia de si las respuestas dadas por las religiones fueran ciertas o no la pregunta es sí, pero ¿ y la vida en sí misma? ¿Existe la felicidad? ¿Puede existir la justicia, la bondad, la belleza?

  En este contexto hemos leído unos fragmentos y hemos visto una representación de algunos fragmentos de El Principito. Un libro único en el más amplio sentido de la palabra ya que no hay ningún libro que se parezca a él, ni remotamente. Solo por su originalidad ya merecería la atención que ha recibido durante décadas. Pero además de tratarse de una obra de arte original y única, es una obra de arte maravillosa.
  Un intento logrado de recoger un atisbo de las ideas de amor, belleza y pureza.  No sé si los ángeles existen, pero si existieran me imagino que serían como nuestro principito, como esos niños y niñas que nos hacen una pregunta y nos muestran de pronto una verdad tan grande como una casa, o más.

  No es un libro para niños y niñas, lo que no quiere decir que no se les pueda leer, simplemente no es para la infancia sino que trata también de la infancia, que es algo muy distinto. Cada persona joven o adulta, al leerlo puede sentir algo distinto, interpretarlo o darle una lectura diferente, una niña o un niño, también podrán sentirse atraídos por algún pasaje: el amor por la flor y la necesidad de protegerla, el dominante rey, el zorro y la domesticación...pero no podrán darle un sentido de conjunto al texto ya que esto sólo lo pueden hacer adultos pues se trata de una obra filosófica y existencial


   El martes y miércoles vamos a trabajar sobre otras dos obras que también son libros de culto, esto es, obras que tienen el aura de un mito tras de sí. El  Guardian entre el Centeno y El diario de Ana Frank.
Protagonizadas por dos adolescentes sitúan al adulto del siglo XX ante sí mismo de modos distintos pero muy decisivos.

  Lo que quiero que hagáis es buscar información e imágenes sobre estos dos libros. 
¿De qué tratan?¿Quién los escribió?¿Hay adaptaciones de los mismos?¿Me parecen interesantes?¿ Por qué sí o por qué no? ¿Alquien de mi entorno los ha leído?


   No quiero nada de cortar y pegar, quiero que investiguéis y que cada uno elabore una entrada personal sobre el tema. ¡Hasta el próximo martes!